El joven de 13, que no ha sido identificado, continúa en estado crítico luego de que se determinara que tiene muerte cerebral tras ser impactado por una bala en la cabeza en un parque de Staten Island.
Un preadolescente de Staten Island que recibió un impacto de bala en la cabeza el viernes en la tarde mientras estaba en un parque infantil del condado ahora tiene muerte cerebral, informaron fuentes de la policía.
El joven de 13 años, que hasta el momento no ha sido identificado públicamente, sigue en estado crítico en el Centro Médico de la Universidad de Richmond, dieron a conocer las fuentes el domingo.
En el video del tiroteo se puede observar a la víctima de pie con otros adolescentes cerca de las canchas de baloncesto en Stapleton Playground momentos antes de que se escucharan los disparos cerca de las 3:50 de la tarde del 19 mayo.
Una única bala hirió al preadolescente en el lado izquierdo de la cabeza y salió del lado derecho, declararon las fuentes policiales.
Rápidamente, se tiró al piso mientras sus amigos se dispersaban.
Dos sujetos se fugaron por un camino en el lado de Hill Street del parque, mientras que otro grupo de cinco corrió hacia las cercanías Stapleton Houses, de acuerdo con los funcionarios y fuentes policiales.
Los oficiales hallaron al niño, que no cuenta con antecedentes penales, recostado boca arriba cerca de la cancha de baloncesto, inconsciente y sangrando por la cabeza.
La víctima residen en South Beach Houses y asiste a la escuela en The Eagle Academy en Stapleton, informó Staten Island Advance. El medio añadió que un defensor de la comunidad estaba tratando de ayudarlo a escapar de la violencia callejera antes del tiroteo.
Un testigo le notificó a los agentes que él y la víctima acababan de salir de la escuela ese viernes. Se dirigieron a una bodega en Tompkins Avenue, después se fueron al parque donde estuvieron unos 45 minutos aproximadamente.
El testigo le dijo a las autoridades que de repente escuchó dos disparos y la víctima cayó al piso, de acuerdo con las fuentes. Se escapó del lugar y llamó al 911.
Por su parte, el alcalde Eric Adams prometió hallar a los responsables de la violencia.
“Demasiadas armas, demasiadas personas que son peligrosas pueden tener armas y, a menudo, son reincidentes extremos que claramente vienen a nuestras calles”, declaró el alcalde. “Esto… realmente me rompe el corazón que le disparen a un niño de 13 años… encontraremos a las personas responsables”.